La
relación entre la ética y la política resulta ser un debate clásico y también
de gran actualidad ya que la tensión que existente entre ambos conceptos
permite dilucidar algunas de las causas o consecuencias del mundo que estamos
viviendo hoy en día.
Recientemente Plaza y Valdés acaba de editar el
libro Ética de la Política en John Stuart Mill y George Grote. Los dos textos
incluidos en esta edición abordan un tema que se revela cada vez más
importante: la ética de políticos y gestores.
"El
gobernante" de Taylor es una recensión escrita por John Stuart Mill y
George Grote, siendo este último un destacado utilitarista discípulo directo de
Bentham, político activo y autor de varias obras de teoría política, además de
uno de los grandes historiadores experto en la Grecia Antigua. El texto no
trata del político afanado en la dirección de un Estado, sino del político de
segundo nivel o gestor público. Los problemas morales característicos de este
ámbito no conciernen a decisiones trascendentales de largo alcance, sino más
bien a «siniestros intereses» egoístas a los que puede rendirse este tipo de
político y a asuntos cotidianos que amenazan con «mantenerle enterrado bajo una
losa de rutina».
"Reflexiones
sobre la reforma parlamentaria", aunque se vio ocultada enseguida por sus
"Consideraciones sobre el Gobierno Representativo", es una obra de J.
S. Mill que contiene varios asuntos de interés: una pionera defensa del voto
femenino, una extensa argumentación contra el voto secreto y, especialmente, su
doctrina de los arreglos admisibles o compromisos necesarios para lograr
mejoras administrativas y políticas. Ambos textos se traducen al castellano por
primera vez y demuestran que también conviene reflexionar sobre la
«micro-política».
Entender la política como
una ciencia o una actividad independiente de la ética no significa que no
entablen una relación, unas veces endeble otras veces sólida. Es más, separar
estos dos ámbitos en nuestra vida social nos ha llevado a enfrentarnos con un
mundo fracturado, con el crecimiento de las desigualdades sociales, con algunos
grupos sociales altamente beneficiados a costa de la marginación de otros, con
un creciente deterioro de la naturaleza y con sociedades excluyentes,
plutócratas y corruptas.
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